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domingo, 30 de marzo de 2014

Dos nuevos satíridos


Saltacercas (Lasiommata megera), otro de los lepidópteros comunes que estos días de primavera aún algo fríos comienzan a volar para libar néctar y reproducirse. El nombre resulta evocador de los espacios donde habita; áreas con huertos, setos y campiña con cultivos: el paisaje típico del extrarradio de pueblos como Fregenal de la Sierra.
Nos topamos con ella hoy domingo, 30 de marzo de 2014 cerca de la finca El Cabezo (Fregenal de La Sierra)


Coenonympha glycerion descansaba en la hierba que bordea el tránsito entre el final del Camino de Las Huertas y la entrada a la finca La Aceña (Fregenal de La Sierra) la pasada semana

sábado, 29 de marzo de 2014

Curiosidades científicas de las ranas verdes

Rana verde común (Pelophylax perezi); Cuesta de Villarreal (Fregenal de la Sierra), 29 marzo 2014

Las ranas verdes animan con sus coros los estanques, albercas y demás masas de agua - grandes o pequeñas- en los diferentes hábitats, pues son ubicuas y adaptables. Son fundamentales en el equilibrio ecológico pues son presa de multitud de depredadores. Larvas de insectos acuáticos como libélulas y escarabajos buceadores se alimentan de los renacuajos, al igual que culebras de agua y aves como el martín pescador. En estado adulto son capturadas por cigüeñas, garzas de varias especies, rapaces como el milano negro y el busardo ratonero. Los ejemplares juveniles suelen ser presa de pájaros como el alcaudón real. Igualmente, nutrias, turones y tejones son los mamíferos que las suelen incluir en su dieta. Antaño, solían ser capturadas en nuestros pueblos para vender o rifar sus ancas de rana y su abundancia en algunos lugares era tal que no faltan topónimos asociados a ellas; valga como ejemplo el del "Cantarranas", denominación que aparece en diferentes lugares para dar nombre a determinados parajes caracterizados por la abundancia de estos anfibios.
La rana verde común corresponde a la especie Pelophylax perezi y es la más abundante en la Península Ibérica. Hay especies muy parecidas en Centroeuropa (Pelophylax lessonae y Pelophylax ridibundus); prácticamente indistinguibles. Para complicar más la cuestión, hay poblaciones de ranas híbridas, fruto de cruces, que tienen capacidad de reproducirse si se aparean con una de las especies parentales. Por ejemplo, en la zona pirenaica y las proximidades del valle del Ebro hay una forma híbrida: la rana de Graff, resultado del cruce entre las especies perezi y ridibundus que a su vez puede dar lugar a puestas fértiles si se aparea con una de estas dos. Ello quiere decir que la rana híbrida de Graff no es una especie, sino un híbrido con capacidad de perpetuarse si se aparea con cualquiera de las especies que la han generado. Esto es un rompecabezas fascinante para los genetistas, así como un interesante campo para la investigación científica. En cualquier caso, las ranas verdes que hallamos en Extremadura pertenecen con seguridad a la especie perezi, pues estos complejos de hibridación  nos quedan, de momento, bastante alejados.

domingo, 16 de marzo de 2014

Primavera 2014; un atisbo de esperanza


 
 
 
 
Mirlo común (Turdus merula) juvenil; Montánchez (Cáceres)
 
16 marzo de 2014

 

Soleado; prados, olivares y setos del Camino de Las Huertas; Fregenal de La Sierra (Badajoz); entre las 13,00 – 17,00 horas

 

La subida de las temperaturas y las lluvias de finales de invierno hacen florecer algunas plantas comunes como el altramuz silvestre, las abundantes crucíferas amarillas y el rabanillo.
Aves como verdecillos (Serinus serinus), carboneros comunes (Parus major) y mirlos comunes (Turdus merula) cantan para delimitar sus parcelas y es posible avistar el vuelo de algún milano negro (Milvus migrans) llegado de sus cuarteles de invernada africanos. A medida que nos adentramos en áreas donde abundan los setos, los cuales se desarrollan paralelos al arroyo, que a su vez sigue la línea del camino, los machos de chochín (Troglodytes troglodytes) emiten su musical y potente canto. Es también posible escuchar el no menos precioso canto de la curruca capirotada (Sylvia atricapilla), probablemente de los ejemplares sedentarios, pues la abundante invernada procedente de Europa parte hacia sus zonas norteñas de cría.

En la alberca situada una vez que dejamos atrás la finca La Aceña, rebosante de agua y con mucha vegetación subacuática de ceratófilos, los tritones ibéricos (Lissotriton boscai) están reproduciéndose, pues observo varios ejemplares, machos y hembras, estas últimas con partes ventrales abultadas, signo inequívoco del desarrollo de los embriones que tendrán que ser fecundados por los machos. Podía verse como estos les enviaban el olor de sus feromonas sexuales generando una pequeña corriente con la cola. En estas masas de agua estancadas pero limpias, con mucha vegetación, tienen estos anfibios grandes posibilidades para su supervivencia, de ahí que todo el rosario de canales, aljibes y estanques de esta arquitectura vernácula casi en desuso, podrían convertirse en microrreservas.

Al dirigirme de vuelta al pueblo tomando el camino que conduce a la Cuesta de Villarreal, tomo dirección sur y me adentro en un paisaje abierto donde predomina el olivar, el prado y los árboles frutales salpicados. Observo un macho de tarabilla común (Saxicola torquatus) en plena exhibición nupcial y con un llamativo plumaje de celo; al mismo tiempo, identifico una especie de mariposa, concretamente el cardenillo (Tomares ballus), perteneciente a la familia Lycaenidae, formada por muchas especies de pequeño tamaño y muy parecidas. Al ver su distribución geográfica en la guía, observo que está circunscrita a la Península Ibérica, una reducida franja del sur de Francia y norte de África. Esta especie, no obstante, es fácil de identificar por las alas inferiores de color verde en contraste con las superiores anaranjadas y moteadas de oscuro. Estas pequeñas mariposas, de diferentes especies, suelen ser comunes en estos espacios agrarios.

Sobre las 16,00 horas me dirijo de nuevo al inicio del Camino de Las Huertas y, con la grata compañía de mi sobrinita Lucía, contemplo el luminoso amarillo de las flores de la retama negra y perseguimos a varias especies de mariposas para fotografiar: Vanesa atalanta, Pararge aegeria, Colias croceas y Lycaena phaleas.